"Cuando toqué por primera vez una guitarra eléctrica, sentí como si me atravesara un rayo", dice Julia Pierce, cantante y guitarrista del grupo. "Instantáneamente me cayó la idea de armar una banda. Y ahí empezó mi búsqueda".
Julia quería encontrar chicas que compartieran sus gustos y estuvieran inspiradas por bandas de rock'n'roll como las que ella escuchaba, entre ellas Garbage, Foo Fighters y My Chemical Romance. Luego de varios meses de publicar avisos online y en perióicos, repartir volantes en las disquerías locales y varios intentos, llegó la baterista Nia Lovelis.
Nia, hija de una cantante y un músico, creció rodeada de música, y toca la batería desde los siete años. "Estuve rodeada de artistas y músicos toda mi vida", recuerda Nia, "y sabía que no había nada que quisiera más que estar en una banda".
La difícil búsqueda continuó, y así encontraron a Miranda Miller, que canta desde los tres años y aprendió a leer música a los cuatro. No sólo podía...